Dicen que caer es como volar, y yo siempre me lo he creído.
Pero hay veces en las que caes sin más. Todo hacia abajo.
Notas como vas recorriendo uno a uno todos los precipicios del mundo.
Sin alas, sin frenos, sin paracaídas, sin… nada.
Y lo que es peor, sin nadie.
Espero que pronto recuperes el vuelo, te aseguro que en otoño desde arriba todo es mucho más bonito.
ResponderEliminarNo sé dónde has oido semejante cosa. ¡Caer es como volar! Todo el mundo sabe que volar es imposible, y caer es... inevitable.
ResponderEliminarSoy cruel porque me gusta cómo escribes cuando estás triste... Me gusta cómo escribes.